Ir al contenido principal

Esa actividad llamada sueño

La mayoría de la gente atesora el sueño como un periodo de bendita inactividad. Pero los estudios demuestran que el sueño es un estado muy activo. Cambiamos la posición del cuerpo durante toda la noche, lo cual es normal y útil para mantener una buena circulación. Nuestro cuerpo libera hormonas importantes durante el sueño. Nuestro sistema inmunitario se reinicia. Y el cerebro se encarga en una variedad de funciones críticas de limpieza.

Las dos etapas del sueño

No debe confundirse con las «fases» del sueño, las dos «etapas» son: REM, cuyas siglas en inglés (Rapid Eye Movement) significan movimiento ocular rápido; y NREM, o movimiento ocular no rápido.

NREM

Cuando empezamos a quedarnos dormidos, entramos en el sueño NREM. El sueño NREM se compone de las cuatro fases del sueño. Sin embargo, la etapa de sueño REM se produce periódicamente durante todo el ciclo.

REM

La primera etapa REM se produce aproximadamente a los 90 minutos de dormirnos y se repite cada 90 minutos, siendo la etapa más larga a medida que avanza la noche.

  • Proporciona energía al cerebro y al cuerpo
  • Permite el rendimiento diurno
  • El cerebro está activo y se producen los sueños
  • Los ojos se mueven hacia delante y hacia atrás
  • El cuerpo queda inmóvil a medida que se desactivan los músculos

La fase REM y los sueños

REM recibe su nombre de los rápidos movimientos oculares que se producen durante esta fase del sueño. También se caracteriza por una pérdida repentina y drástica del tono muscular. De hecho, los músculos esqueléticos de una persona durante el sueño REM se paralizan. Esta etapa está marcada por un nivel de actividad de las ondas cerebrales similar al estado de vigilia y es la fase en la que se producen los sueños. La fase REM fue la primera que documentaron los investigadores en 1953. Dado que los sueños han sido un tema importante en el estudio de la psicología, este descubrimiento se consideró revolucionario. Este extracto forma parte de su informe:

El recuerdo vívido que se podía obtener al despertar a un individuo en mitad de la noche, cuando sus ojos se movían rápidamente, era simple y llanamente milagroso. [Parecía abrir] a estos individuos un mundo nuevo y emocionante, siendo los recuerdos de sus sueños anteriores únicamente un vago recuerdo por la mañana. Ahora, en lugar de echar solo una breve mirada al mundo de los sueños cada noche, los sujetos podían tener hasta diez o doce sueños cada noche.
(Dement, 1978, pág. 37; citado en Pinel, 1993)

Mientras duerme

Durante las fases profundas del sueño NREM (fases 3 y 4), el cuerpo repara y regenera tejidos, fortalece huesos y músculos, y parece reforzar el sistema inmunitario. A medida que avanzamos en edad, tenemos un sueño más ligero y dormimos menos. El envejecimiento también se asocia con intervalos de sueño más breves, aunque los estudios demuestran que la cantidad de sueño necesario no parece disminuir con la edad. Si las horas de sueño se reducen, el cuerpo no tiene tiempo para completar todas las fases necesarias para la reparación muscular, la consolidación de la memoria y la liberación de hormonas que regulan el crecimiento y el apetito. Nos despertamos menos preparados para concentrarnos, tomar decisiones o participar plenamente en actividades escolares, laborales y sociales.

Contenido relacionado